La ulceración genital no adquirida sexualmente se refiere a la presencia de úlceras dolorosas en el área genital, que no se deben al contagio de una ITS ni a ninguna otra forma de infección vaginal. Esta condición afecta las superficies mucosas y la piel adyacente. Las úlceras a menudo surgen en asociación con úlceras aftosas orales, que son bastante similares en apariencia.
Se clasifica en dos tipos:
- Ulceración aftosa reactiva aguda
- Ulceración aftosa recurrente aguda.
Úlceras genitales reactivas
Las úlceras genitales reactivas suelen presentarse después de una enfermedad sistémica aguda, como amigdalitis, infección respiratoria superior o enfermedad diarreica. Afectan casi siempre la zona de la vulva en muchachas adolescentes, pero pueden aparecer en mujeres adultas.
Estas úlceras pueden ser muy dolorosas y provocar disuria (dolor al orinar), o evitar la micción por completo (retención aguda de la orina), complicación que requiere atención médica inmediata. Los ganglios linfáticos locales pueden experimentar agrandamiento y sensibilidad.
Las úlceras genitales reactivas suelen desaparecer en pocas semanas y rara vez se repiten.
Úlceras genitales recurrentes
Las úlceras genitales recurrentes son más comunes en las mujeres que en los hombres. Pueden surgir continuamente, por ejemplo de forma regular antes de la menstruación cada mes. Aunque tienden a ser más pequeñas que las úlceras reactivas, en ocasiones pueden ser grandes y numerosas.
Algunos casos de ulceración genital recurrente parecen ser provocados por una infección específica, más frecuentemente el virus de Epstein-Barr.
¿Cómo luce la ulceración genital no adquirida sexualmente?
Esta condición se presenta con una o más erosiones/úlceras aftosas profundas en el interior de la vulva y la piel adyacente. El centro de la úlcera generalmente es amarillento pero puede llegar a ser negro debido a la necrosis del tejido. Suele haber un borde rojo alrededor de la úlcera, que puede variar en tamaño de 1 mm a más de 1 cm de diámetro. Las lesiones pueden estar acompañadas de una hinchazón considerable.
¿Qué exámenes de diagnóstico se deben hacer?
En primer lugar se deben realizar pruebas de cultivo, bacterianas y virales, para descartar las causas infecciosas de las úlceras genitales, como el herpes simple (herpes genital), la sífilis y el chancroide.
Otras pruebas adicionales estarán determinadas por los síntomas de la enfermedad subyacente, pero deben incluir pruebas para la mononucleosis infecciosa. En el caso de la biopsia de la úlcera se debe incluir una muestra de piel circundante.
Tratamiento de la ulceración genital no adquirida sexualmente
El tratamiento de las úlceras aftosas genitales dependerá de la causa, pero puede incluir:
- Analgésicos como el paracetamol, antiinflamatorios no esteroideos o analgésicos más fuertes
- Ungüento anestésico tópico
- Ungüento o crema de corticosteroides tópico
- Inyecciones de esteroides intralesionales
- Esteroides orales
- Antibióticos antistafilocócicos
- Curso prolongado de doxiciclina o eritromicina para prevenir las recurrencias.