Durante el ciclo menstrual los órganos reproductores de la mujer trabajan para producir el óvulo y crear un entorno normal para que los espermatozoides puedan fertilizarlo. No es de extrañar entonces que en ese momento el cuerpo de experimente muchos cambios, especialmente en el nivel hormonal. Estos cambios provocan la ocurrencia de las descargas vaginales, que varían de mujer a mujer, pero que son principalmente fluidos acuosos.
La función biológica fundamental de tales secreciones es llevarse todas las células muertas y bacterias peligrosas de la vagina. Estos componentes pueden afectar no sólo a la consistencia del flujo vaginal, sino también su color e incluso el olor. Durante las descargas de ovulación se vuelve más espeso y mientras se está haciendo ejercicio, se torna cada vez más grueso. Es difícil decir qué cantidad debe considerarse como normal, ya que depende del cuerpo de cada mujer y los niveles de hormonas en el mismo. Algunas mujeres tienen que usar protectores diarios en su ropa interior, debido a la gran cantidad de secreción que presentan.