El flujo vaginal pegajoso por lo general ocurre antes y después del período, y su presencia se debe a los bajos niveles de estrógeno en el cuerpo. La consistencia de este flujo va desde gruesa y grumosa hasta cremosa y pastosa, mientras que el color puede ser claro, blanco nublado o amarillo pálido. Si viene acompañado de un mal olor a pescado, tiene un color inusual amarillo o verdoso, hay picor vaginal, hinchazón o enrojecimiento, este flujo puede indicar la presencia de una infección. (Ver: Síntomas de una infección vaginal)
A continuación veremos cuándo el flujo vaginal pegajoso se considera normal y cuándo debe ser un motivo de preocupación.
Flujo vaginal blanco y pegajoso antes y después del período
La consistencia del moco vaginal está muy condicionada por el equilibrio hormonal estrógeno-progesterona. Durante la ovulación en la mitad del ciclo menstrual, los niveles de estrógeno aumentan mientras que los niveles de progesterona disminuyen, resultando en una mayor cantidad de flujo claro y acuoso.
Después de la ovulación, los niveles de estrógeno comienzan a disminuir gradualmente a medida que los niveles de progesterona aumentan. Esta es la causa por la que el flujo vaginal pasa de pegajoso y claro a grueso y grumoso, siendo imposible para las células de esperma nadar a través de él. El color varía de claro a blanquecino y la consistencia se siente como loción corporal cuando se frota entre los dedos. Del mismo modo, los niveles de progesterona son más altos que los de estrógeno después que termina el período, por lo que en esta etapa el moco cervical aun es grueso o espeso.
Flujo vaginal claro y pegajoso durante el embarazo
El flujo vaginal pegajoso y claro es un signo común del embarazo que se produce muy temprano, a veces durante la segunda semana del primer trimestre. Durante esta etapa, el cuerpo pasa por muchos cambios hormonales que alteran el equilibrio estrógeno-progesterona. Los niveles de estrógeno aumentan y la vagina comienza a expulsar una secreción que puede ser muy pegajosa y viscosa. A medida que avanza el embarazo y aumentan los niveles de estrógeno, el moco se vuelve cada vez más acuoso, perdiendo su elasticidad. (Ver: Cuestiones sobre el flujo vaginal en el embarazo)
La secreción pegajosa normal durante el embarazo debe ser clara o blanca, sin olor significativo. Debido al aumento de la cantidad, el olor puede llegar a ser ligeramente almizclado.
Flujo vaginal pegajoso y amarillo: ¿normal o no?
Un ligero tono amarillo en el flujo vaginal puede ser normal y no necesariamente indica que algo malo está pasando. Mientras no haya mal olor, picor vaginal, hinchazón o molestia, puede ser totalmente normal.
Pero si la descarga amarilla y pegajosa viene acompañada de un fuerte mal olor, picazón, hinchazón y enrojecimiento de la vagina/ vulva, dolor al orinar o durante las relaciones sexuales, dolor pélvico, es posible que tengas una infección. Los tipos más comunes de infecciones vaginales que causan moco vaginal amarillento incluyen a la vaginosis bacteriana, la gonorrea y la clamidia. Tenga en cuenta que las dos últimas son ETS y causan otro grupo de molestias vaginales.
Flujo vaginal marrón y pegajoso: ¿Debo preocuparme?
El color marrón indica la presencia de sangre en el flujo, que puede deberse a causas normales y otras veces a causas no tan normales. Un caso en el que se presenta de forma natural es en los últimos días del período, pero por ejemplo el daño en los órganos reproductivos puede causar sangrado vaginal, lo que a su vez resulta en secreción sanguinolenta con una consistencia pegajosa o viscosa. Es importante no pasar por alto este suceso, incluso si la cantidad de sangre parece ser relativamente poca. Un examen pélvico y vaginal completo debe revelar la causa exacta de la hemorragia.
Si recientemente has comenzado a tomar pastillas anticonceptivas, entonces esa puede ser la causa del sangrado. Esto es bastante normal y no constituye una razón de preocupación. Si el sangrado se produce justo después de las relaciones sexuales, entonces puedes tener sangrado postcoital, lo que es normal en algunas mujeres, pero requiere la valoración de un especialista. Otra posibilidad sería el sangrado o manchado intermenstrual, que por lo general ocurre en cualquier momento del ciclo y puede deberse a diferentes factores.
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