Olor y flujo vaginal

El flujo vaginal es común entre las mujeres en edad de procrear, y su textura, color y olor pueden variar dentro de los parámetros normales, dependiendo de dónde se encuentra en su ciclo menstrual. Sin embargo, los cambios no característicos en las secreciones vaginales, tales como exceso de descarga junto con un olor anormal desagradable, podrían indicar la necesidad de ver a su profesional de la salud.

Tipos. Una descarga vaginal normal es una mezcla de líquido, células y bacterias que se mueve constantemente a través de la vagina, con el fin de mantenerla limpio. El color y consistencia pueden cambiar desde pegajosa y de color blanco a acuosa y clara, según dónde esté en su ciclo reproductivo. El flujo vaginal es común, incluso durante el embarazo. Otros factores, como el estrés y la excitación sexual pueden aumentar la cantidad de flujo vaginal. También puedes notar más flujo vaginal en el momento de la ovulación.

Vaginitis. Subyacentes condiciones de salud pueden causar cambios notables en el flujo vaginal y su olor. Estos síntomas pueden estar emparejados con picazón, irritación, y/o dolor y sangrado en las relaciones sexuales y al orinar. Las infecciones por hongos son un tipo de vaginitis causado por un crecimiento excesivo de hongos microscópicos tales como C. albicans, esta infección puede hacer que el flujo vaginal se vuelva denso y grueso en su textura, similar al queso cottage. Como resultado de la vaginosis bacteriana, el flujo vaginal puede ser delgado, fibroso y tener un olor a pescado maloliente. La tricomoniasis, técnicamente una enfermedad de transmisión sexual, también cae en la categoría de vaginitis, y puede resultar en una descarga espumosa y de color amarillo verdoso.

ETS. La tricomoniasis es una de las muchas enfermedades de transmisión sexual que pueden alterar la cantidad de flujo vaginal, así como causar un cambio en el olor. La clamidia, gonorrea y otras enfermedades de transmisión sexual pueden causar también flujo vaginal anormal. La mayor problemática con muchas de estas enfermedades, es que pueden ser totalmente asintomáticos. Por ejemplo, cuatro de cada cinco mujeres con gonorrea no presentan síntomas, tres de cada cuatro mujeres que tienen clamidia son asintomáticas.

Al ver a su médico. Haga una cita con su médico si notas un abrupto cambio en tu olor vaginal y la cantidad de descarga, sobre todo cuando la descarga es verdosa, amarillenta, espesa o normal junto con otros síntomas, como un olor desagradable, ardor e irritación vaginal y sangrado leve no relacionado con su periodo menstrual. Esto es especialmente importante si tienes una nueva pareja sexual o múltiples parejas, ya que los síntomas de las ETS son similares a las infecciones por levaduras y la vaginosis bacteriana, que no son contagiosas. Las infecciones por hongos son muy comunes, y muchas mujeres utilizan medicamentos de venta libre para tratar una infección no relacionada, lo que puede empeorar los síntomas. Si nunca has tenido una infección vaginal, y no estás segura de que tienes una, consulte a su médico antes del auto-tratamiento.

Cuidados en el hogar. Para mantener la vagina en buenas condiciones de funcionamiento y evitar el exceso de descarga, como mínimo, debes mantener el área genital limpia y seca. Evite las duchas vaginales, aunque esto puede hacer que te sienta más fresca, puede lavar las bacterias útiles de la vagina, en las que esta se apoya en para protegerse contra la infección. Evite enmascarar su olor natural con aerosoles para higiene femenina, fragancias o polvos. Elija ropa interior de algodón transpirable sobre las de seda o nylon, y evita los pantalones y chores demasiado ajustados. Por último, y quizás lo más importante, siempre usa condones para protegerte contra las enfermedades de transmisión sexual.