No cabe duda de que el ejercicio forma parte de cualquier plan de vida saludable; nos mantiene libres de estrés, evita el sobrepeso y previene el desarrollo de numerosas enfermedad, entre muchos otros beneficios. Cuando se trata de la mujer, el ejercicio también ayuda a mantener un ambiente hormonal más sano, reduce los calambres menstruales y combate las molestias del síndrome pre-menstrual. Sin embargo muchas mujeres reportan un retraso en su menstruación después del entrenamiento físico. Entonces cabe preguntarse: ¿es cierto que existe una relación entre el ejercicio y la menstruación?, ¿el ejercicio puede estar retrasando tu período menstrual?
¿El ejercicio retrasa la llegada del período menstrual?
Sí, de hecho en algunas mujeres el ejercicio puede ser la causa de la amenorrea secundaria, pero en realidad todo depende de la intensidad del entrenamiento.
Por lo general, el ciclo menstrual normal de una mujer puede durar de 21 a 32 días. En la primera etapa del ciclo, el nivel de estrógenos aumenta, el revestimiento del útero comienza a engrosarse y un óvulo empieza a madurar en uno de los ovarios . Este óvulo completamente maduro sale de su folículo en torno a la mitad del ciclo (ovulación), y viaja a través de las trompas de Falopio hacia el útero. Si no se produce el embarazo, el revestimiento uterino será descartado y arrojado en forma de sangrado durante el período menstrual. Ahora bien, aunque el ejercicio físico regular ayuda a mantener un entorno hormonal sano y contribuye a la regularidad del ciclo, es cierto que el ejercicio vigoroso y extenuante puede interrumpir y retrasar tu período menstrual. Este efecto es muy característico en las atletas de alto rendimiento, quienes suelen presentar retraso y ausencia menstrual frecuentemente.
¿Por qué el ejercicio puede retrasar el período menstrual?
Existen varios factores que determinan el retraso menstrual causado por el ejercicio extenuante; los más importantes son:
Bajos niveles de estrógeno en el organismo. El entrenamiento riguroso puede alterar tus hormonas temporalmente y reducir la producción normal de estrógeno que se necesita para completar un ciclo menstrual.
Tensión adicional en el cuerpo. Los ejercicios fuertes pueden ejercer demasiada presión sobre el cuerpo, provocando que este le quite prioridad a determinados procesos en un intento de ahorrar energía y mantener otras funciones vitales. El período menstrual es necesario para la reproducción, pero no es importante para garantizar la supervivencia, por eso el cuerpo suele detener el funcionamiento normal del ciclo y provocar un retraso o la ausencia del período menstrual.
Bajo porcentaje de grasa. El sobre-entenamiento puede conducir a un porcentaje de grasa muy bajo en algunas mujeres, y esto tiene un impacto directo en el ciclo menstrual (amenorrea atlética). Las mujeres naturalmente tienen y necesitan más grasa corporal que los hombres. Esta grasa adicional apoya el buen funcionamiento del sistema reproductivo femenino y ayuda a regular las hormonas sexuales; según un estudio, la mayoría de las mujeres necesita al menos entre 15 y 17% de grasa corporal. Si el ejercicio físico vigoroso te está llevando a perder demasiada grasa, es más probable que experimentes retrasos en el período .
Cómo normalizar el ciclo menstrual si el ejercicio ha estado retrasando tu período
Como ya hemos explicado, el ejercicio vigoroso puede retrasar el período menstrual, pero este efecto puede ser revertido. En algunos casos, la reducción de la actividad física puede ser todo lo que se necesita para restaurar el ciclo normal, sin embargo otras mujeres pueden requerir un plan de alimentación que aumente su consumo de calorías. Una vez que el cuerpo comience a recibir las calorías suficientes que necesita para realizar sus funciones vitales, es más probale que el período menstrual se regule.
Si la reducción del ejercicio y los ajustes en la alimentación no funcionan, es recomendable acudir al médico para ser examinada y recibir una valoración profesional.
Otros factores que pueden estar retrasando tu período menstrual
Estrés
El estrés puede conducir a la alteración en los niveles de muchas hormonas en el organismo y afectar la parte del cerebro que se encarga de regular tu ciclo menstrual. Además si el estrés ha estado afectándote desde hace mucho tiempo, es normal que experimentes una pérdida o aumento repentino de peso, lo cual puede contribuir también al retraso del período menstrual.
Peso corporal anormal
Las mujeres que tienen bajo peso corporal, sobrepeso o que son obesas suelen experimentar períodos menstruales irregulares, retraso menstrual, manchas entre períodos. No tener un peso corporal saludable interrumpe la ovulación y causa fluctuaciones en los niveles hormonales.
Síndrome de ovario poliquístico
El síndrome de ovario poliquístico es una causa común de ciclos anovulatorios, retrasos en el período, ausencia menstrual y ciclos muy irregulares.
Anticonceptivos hormonales
Si recientemente has empezado o dejado de usar píldoras anticonceptivas, u otro anticonceptivo hormonal, esa puede ser la causa que está retrasando tu período menstrual. Tu cuerpo puede necesitar hasta 6 meses para regular el ciclo y adaptarse a los nuevos cambios hormonales. (Usar la píldora para retrasar los períodos menstruales)
Enfermedades crónicas
Las enfermedades crónicas también pueden retrasar la menstruación. La diabetes es una de estas enfermedades, sobre todo cuando no está controlada, ya que se producen desequilibrios en los niveles de glucosa en la sangre y esto termina afectando los niveles de las hormonas que regulan el ciclo menstrual. Otro ejemplo es la enfermedad celíaca, un trastorno inflamatorio intestinal provocado por la intolerancia al gluten que puede afectar tu capacidad para absorber los nutrientes; muchas mujeres que padecen esta condición presentan retraso en sus períodos menstruales, menopausia precoz, amenorrea secundaria e infertilidad.
Menopausia temprana
La mayoría de las mujeres entran en la menopausia en torno a los 50 años de edad. Sin embargo, algunas pueden experimentar la menopausia precoz alrededor de los 40 años. La menopausia indica que la cantidad de óvulos se está agotando, por lo que gradualmente el período se irá comportando de manera irregular con retrasos y ausencias prolongadas, hasta detenerse por completo. (¿Qué sucede durante la menopausia?)
Problemas de tiroides
La tiroides regula el metabolismo y los niveles de ciertas hormonas en nuestro cuerpo. Cuando esta glándula no funciona de forma adecuada, los niveles hormonales cambian, lo cual puede traducirse en períodos menstruales ausentes, retardados, o muy frecuentes y abundantes.