El flujo vaginal es normal, pero la cantidad puede ser alterada por las infecciones, los cambios hormonales, las enfermedades y el estrés. Algunas mujeres tienen naturalmente un flujo vaginal más abundante que otras, pudiendo fluctuar a través del ciclo menstrual. Para controlar las molestias que esto puede ocasionar, se necesita:
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- Usar ropa interior de algodón porque ayuda a absorber la humedad y permite que el aire circule.
- Utilizar papel higiénico normal, no muy perfumado ni teñido. Los perfumes y tintes podrían ser irritantes y causar más secreción.
- Evitar las duchas vaginales con productos comerciales, ya que con frecuencia pueden alterar la flora vaginal normal.Evitar el uso de espráis desodorantes vaginales porque pueden causar irritación.
- Suspender los anticonceptivos orales si surge algún cambio al tomarlos. Ellos podrían ser el culpable.Identificar cuándo la descarga vaginal es más pesada y cuando es más ligera. De esa forma se puede cambiar lo que parece afectar la cantidad y consistencia.
Acudir al médico para obtener una revisión completa si se trata de un fenómeno nuevo. El flujo vaginal anormal puede ser un signo de infección, desequilibrio hormonal o enfermedad sistémica.
- Consejos y advertencias
• Si eres sexualmente activa, un cambio en el flujo puede indicar una enfermedad de transmisión sexual o incluso el embarazo. Debes ser examinada por un médico.
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