La mayoría de las veces, el flujo vaginal anormal y constante es provocado por infecciones como la candidiasis, la vaginosis bacteriana o condiciones más graves como las enfermedades de transmisión sexual. Como ves, son condiciones diferentes, con causas y tratamiento diferentes, pero que a vecespueden ser muy similares en sus síntomas. Cuando una mujer presenta flujo anormal y constante, lo primero que debe hacer es tratar de identificar la causa exacta, prestando atención a otros síntomas físicos que se manifiesten.
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En la siguiente guía te enseñamos todo lo que necesitas saber sobre el flujo anormal y constante, dependiendo del color o tonalidad predominante.
Flujo blanco anormal y constante
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El flujo anormal de color blanquecino suele deberse a la proliferación excesiva de hongos vaginales, derivando en una infección por levaduras o candidiasis vaginal. Estas infecciones ocurren cuando se altera el equilibrio entre las bacterias y los hongos que conforman la flora vaginal, causando típicamente un crecimiento excesivo de la levadura Candida albicans. El resultado es una secreción constante de color blanco y textura gruesa, que se acompaña de picazón, hinchazón y enrojecimiento, ardor al orinar y dolor durante el coito. La cantidad de flujo es más abundante de lo normal y se puede experimentar incomodidad vaginal intensa. A veces el flujo vaginal puede ser ligeramente amarillo, sobre todo cuando ha transcurrido tiempo desde la última limpieza.
Las mujeres embarazadas son más propensas a las infecciones por hongos, ya que los cambios hormonales pueden alterar el equilibrio vaginal antes mencionado. Aunque durante el embarazo es normal tener flujo abundante, cualquier cambio en el color, olor y salud vaginal debe ser consultado con el médico. El flujo anormal no debe confundirse con la leucorrea normal del embarazo.
Algunas enfermedades de transmisión sexual pueden causar secreciones abundantes de color blanco en sus primeras etapas.
Flujo amarillento o gris anormal y constante
Muchas mujeres experimentan flujo vaginal amarillento como parte de su sistema de auto-limpieza vaginal, pero eso no es lo más común. El flujo notablemente amarillo y constante suele indicar que algo no está bien, especialmente si se siente picazón, hinchazón u otros síntomas similares a la infección por hongos. Un caso típico de flujo amarillento o turbio es el que causa la vaginosis bacteriana, una condición derivada del sobre-crecimiento de bacterias patógenas. Además del flujo anormal, suele existir un fuerte olor vaginal, como a pescado. Dicho olor tiende a ser significativamente más notable después de las relaciones sexuales.
Otra posible causa de la descarga amarilla es la presencia de un objeto extraño en el interior del canal vaginal, por ejemplo un tampón o condón olvidado. Además de alterar el ambiente vaginal, los objetos extraños pueden descomponerse después de una o dos semanas, aumentando el riesgo de desarrollar una infección seria. (Ver: ¿Qué sabes acerca de los cuerpos extraños dentro de la vagina?)
Si recientemente has tenido relaciones sexuales sin protección con una nueva pareja, también es posible que hayas contraído una enfermedad de transmisión sexual como la gonorrea, la tricomoniasis o la clamidia, que causan flujo anormal de color amarillento, consistencia espesa y cantidad abundante. Además pueden provocar picazón, enrojecimiento e inflamación en la vagina, mal olor, ardor al orinar, dolor durante el coito y manchado entre períodos.
Puede ser normal que el moco cervical se torne de color marrón en ciertas fases del ciclo menstrual. Por ejemplo durante el último día del período la vagina expulsa restos de sangre antigua, mezclados con las secreciones normales. Esto hace que observemos un flujo escaso y marrón 1 o 2 días después.
Tras haberse producido la fecundación de un óvulo o durante la ovulación también se puede notar un flujo marrón, pero estas son causas puntuales, es decir, no provocan flujo anormal constante. (Ver: Sangrado de Implantación; Sangrado vaginal en la ovulación)
El uso de píldoras anticonceptivas puede causar este tipo de secreción por varios meses, pero lo normal es que con el tiempo tu cuerpo se vaya adaptando y el manchado desaparezca. De no ser así, lo mejor es cambiar de método anticonceptivo con la ayuda de un profesional. (Ver: ¿Qué causa el sangrado con la píldora?)
A veces la causa puede ser más grave de lo que imaginas. Condiciones como la enfermedad inflamatoria pélvica, los fibromas, los pólipos, la endometriosis, el cáncer de cuello uterino y el cáncer de ovario pueden provocar flujo anormal y constante de color marrón, al igual que la amenaza de aborto involuntario o el aborto efectivo durante el primer trimestre de embarazo.
¿Qué hacer si tienes flujo vaginal constante?
Lo principal es acudir a la consulta médica para diagnosticar la causa subyacente con precisión y recibir el tratamiento adecuado. Seguramente tomarán algunas muestras del flujo anormal y las enviarán a un laboratorio para su análisis. También harán una serie de preguntas para determinar cuál puede ser la causa de tus síntomas.
El tratamiento varía dependiendo de la causa subyacente. Puedes recibir un tratamiento oral, supositorios vaginales o ungüentos tópicos para aplicar en la zona genital. Si la causa es una ETS tu médico indicará un tratamiento con antibióticos. Es importante seguir sus recomendaciones en cuanto a la forma de llevar el tratamiento; solo así podrás lograr que la infección desaparezca correctamente y no reaparezca en el futuro.
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