Durante la peri-menopausia o fase inicial de la menopausia la mujer comienza a experimentar una serie síntomas en respuesta a los cambios hormonales que están ocurriendo en su cuerpo. Pero en ocasiones estos síntomas pueden causar confusión, ya que también se corresponden con los signos clásicos de un embarazo. Por eso es tan frecuente que una mujer de 45-50 años, sexualmente activa, sienta dudas y se pregunte: ¿cómo puedo saber si estoy embarazada o entrando en la menopausia?
Saber si estás embarazada o comenzando la menopausia
La respuesta a esta inquietud depende en gran medida de los síntomas que estás experimentando. Aunque es cierto que varios síntomas son comunes para ambas condiciones, también existen algunos que sólo corresponden a la menopausia o al embarazo. Conoce todos los detalles a continuación:
Síntomas comunes para el embarazo y la menopausia
Alteraciones en el período menstrual
Este es el síntoma por excelencia, tanto para el embarazo como para la menopausia. Una vez que el óvulo fecundado se ha implantado y ha tenido lugar el embarazo, la mujer notará que su período menstrual no llega en la fecha esperada, o que simplemente se ha producido un manchado ligero. Así mismo, a medida que una mujer se acerca a la menopausia, su período se torna irregular, alternando entre menstruaciones cortas, abundantes o ausentes.
Fatiga
La fatiga suele desencadenarse al principio del embarazo debido a un aumento en los niveles de progesterona y al incremento en la producción de sangre para favorecer el desarrollo del bebé. En la menopausia, la fatiga se debe a la combinación de las fluctuaciones hormonales con la alteración del sueño.
Cambios de humor y dolores de cabeza
Otros síntomas comunes para el embarazo y la menopausia son los cambios frecuentes de humor y los dolores de cabeza o migrañas. En ambos casos se deben a los cambios hormonales / físicos, y al aumento del estrés y la ansiedad.
Estreñimiento
Tanto las mujeres embarazadas como las mujeres menopáusicas son más susceptibles al estreñimiento. La fluctuación de ciertas hormonas puede influir en el funcionamiento digestivo y ralentizar los movimientos intestinales. (menopausia y estreñimiento; embarazo y estreñimiento)
Síntomas específicos del embarazo que no ocurren en la menopausia
Los síntomas del embarazo son causados principalmente por los cambios en los niveles de hormonas y en la circulación sanguínea. Una vez que se ha producido la implantación, el cuerpo de la madre comienza a producir más sangre para alimentar los vasos sanguíneos del útero e iniciar la formación de la placenta. Durante las dos primeras semanas del embarazo, los niveles de estrógeno y progesterona también aumentan significativamente para apoyar al embarazo. 13 días después de la ovulación, la frecuencia cardíaca y el volumen de sangre de la madre siguen aumentando para acomodar al feto, de modo que ya pueda producir su propia sangre y sus vasos sanguíneos.
Hinchazón de los senos
Al principio del embarazo los senos pueden sentirse sensibles, dolorosos e inflamados. Estas molestias irán disminuyendo con el tiempo, a medida que el cuerpo se ajusta a los cambios hormonales.
Enfermedad de la mañana o náuseas matutinas
La mujer embarazada puede sentir náuseas en cualquier momento del día o la noche, pero por lo general son más fuertes justo al despertar en la mañana. Si has tenido relaciones sexuales de riesgo, tu período no ha llegado y sientes náuseas matutinas intensas, entonces es muy probable que estés embarazada.
Aumento de la micción
Al aumentar la presión sobre la vejiga, es probable que una mujer embarazada tenga que acudir al baño con más frecuencia de lo habitual. El incremento en la producción de sangre y en el funcionamiento de los riñones también contribuye a la presencia de este síntoma. Cabe señalar que algunas mujeres pre-menopáusicas pueden experimentar aumento de la micción debido al trastorno de vejiga hiperactiva.
Gases e hinchazón
La mayoría de las mujeres se sienten hinchadas o con exceso de gases en el embarazo temprano, siendo este otro efecto de los niveles hormonales elevados. La hinchazón es similar a la que experimentamos durante el período menstrual, y puede acompañarse de estreñimiento y calambres leves.
Aumento del flujo vaginal
Es normal que se produzca un aumento de las secresiones vaginales desde las primeras semanas del embarazo. En este caso es un flujo blanquecino lechoso, abundante y de consistencia cremosa, denominado leucorrea.
Manchado vaginal
El manchado vaginal ligero y de color marrón es otro síntoma a tener en cuenta para saber si estás embarazada o entrando en la menopausia. Es muy común que las mujeres experimenten manchas ligeras en las primeras etapas del embarazo como resultado de la implantación y los cambios hormonales. Generalmente la implantación ocurre 10-14 días después de la concepción.(¿Sangrado de implantación o menstruación?)
Aversión a los alimentos
Otra señal típica del embarazo es la aversión al sabor y olor de ciertos alimentos. La mujer suele sentir náuseas al comer u oler alimentos que le gustaban mucho antes del embarazo.
Congestión nasal
Los cambios hormonales y el incremento en el volumen sanguíneo pueden provocar congestión nasal en la mujer embarazada. En ocasiones también se puede notar sangrado nasal ocasional.
Síntomas específicos de la menopausia que no ocurren en el embarazo
Los síntomas de la menopausia son el resultado de la fluctuación y la disminución de ciertas hormonas, en especial del estrógeno, que típicamente ocurre a partir de los 45 años. A medida que se acerca la menopausia , la cantidad de estrógeno comienza a fluctuar de manera irregular, hasta que se produce una caída dramática en sus niveles que conduce al cese definitvo de la ovulación. (¿Qué sucede durante la menopausia?)
Sofocos
Un síntoma común de la menopausia es la presencia de sofocos, acompañados de sudoración excesiva, enrojecimiento de la piel, mareos y palpitaciones. Los sofocos también pueden afectar a algunas mujeres embarazadas.
Sequedad vaginal
Una vez que se acerca la menopausia notarás que ya no produces la misma cantidad de flujo vaginal que antes. La piel de la vulva y la vagina se torna cada vez más seca y delgada a medida que la vagina pierde su capacidad para producir suficiente lubricación. La sequedad vaginal puede hacer que las relaciones sexuales sean incómodas o dolorosas. (¿Qué es la sequedad vaginal y cómo combatirla en la menopausia?)
Problemas del tracto urinario
Las mujeres pre-menopáusicas son susceptibles a las infecciones urinarias y a los trastornos de vejiga hiperactiva (mayor frecuencia, urgencia, incontinencia). Para conocer todo acerca de los problemas urogenitales de la menopausia da clic aquí.
Sudores nocturnos
Los sudores nocturnos que te despiertan en medio de la noche impiden que duermas lo suficiente, y hacen que te sientas cansada, estresada y de mal humor durante todo el día.
¿Es posible quedar embarazada en la menopausia?
Normalmente una mujer en edad fértil no asume que sus síntomas se asocian con la menopausia, al igual que una mujer de 45 años, o más, piensa que ya no puede quedar embarazada, pero no siempre es así. Aunque las posibilidades son más bajas, el embarazo todavía es posible.
Al entrar en la menopausia, el cuerpo femenino experimenta el cese progresivo de los ciclos menstruales, hasta que se detienen por completo. Este proceso de irregularidades y ausencias menstruales puede demorar varios meses e incluso 1 año, período donde es posible concebir un embarazo inesperado. Todavía el cuerpo puede estar liberando sus últimos óvulos, y si la mujer mantiene relaciones sexuales desprotegidas, entonces existe el riesgo de quedar embarazada. Nota: la ausencia menstrual no indica necesariamente que no ha ocurrido la ovulación.
Se han registrado casos en los que la mujer no es consciente de su embarazo hasta varios meses después, cuando ha acudido al médico por la presencia de dolores estomacales o de espalda.
Por eso es importante realizar un seguimiento de todos los ciclos menstruales hasta que se haya establecido completamente la menopausia (ausencia menstrual durante 12 meses consecutivos), tomando nota de cualquier cambio que se produzca en el cuerpo. Como se ha explicado antes, existen signos claros que nos ayudan a identificar si hay embarazo o no. Así mismo, es fundamental el uso de un método anticonceptivo; muchas mujeres mayores de 40 años sienten que no necesitan la anticoncepción durante la perimenopausia, y eso es un error. La anticoncepción es la única forma de garantizar que no vas a quedar embarazada si eres sexualmente activa en esta etapa. Una alternativa muy utilizada es la ligadura de trompas, donde se cortan o se cierran las trompas de Falopio para evitar futuros embarazos.
La menopausia y el test de embarazo
Cuando la mujer tienes dudas y no puede determinar si está embarazada o en la menopausia, suele realizar un test de embarazo. Pero hay un factor importante a tener en cuenta: las mujeres que están entrando en la menopausia suelen tener niveles más altos hCG (gonadotropina coriónica humana), también llamada la hormona del embarazo. Como es de esperar, hacerse una prueba de embarazo en la menopausia puede conducir a un resultado falso positivo.
Según la Asociación Americana de Embarazo, algunas mujeres pueden dar positivo si sus niveles de hCG son de 5 mUI/ml o más; teniendo en cuenta que algunas mujeres peri-menopáusicas pueden tener niveles de hasta 14 a 15 mUI / ml, se plantea que el test de embarazo no es una alternativa confiable para ellas. Lo más recomendable es acudir al médico para ser examinada.
Nota: las pruebas de embarazo son una alternativa confiable para diagnosticar el embarazo en mujeres con edad reproductiva, pero la obtención de un resultado fiable depende de varios factores, en especial del tiempo de retraso menstrual que se tenga. (¿Cuándo debo hacerme una prueba de embarazo?)