Todo lo que necesitas saber sobre el flujo vaginal blanco con aspecto lechoso

Los sitios web en internet que se dedican a temas de salud, frecuentemente están llenos de comentarios y preguntas de mujeres ansiosas que quieren conocer la causa de su flujo vaginal lechoso. En los foros se puede debatir fuertemente acerca de la naturaleza y origen de este síntoma. En pocas palabras, este es un tema candente y crítico, es hora de averiguar todos los detalles.

Flujo vaginal blanco, ¿es un síntoma de alarma?

Contrariamente a la creencia popular, el flujo vaginal es completamente un estado natural de las zonas íntimas de la mujer, en edad reproductiva. El cuerpo femenino segrega ciertos fluidos como un mecanismo de prevención contra las infecciones. Además, se dice que limpian e hidratan la mucosa vaginal, previenen la resequedad y la sensación de opresión.

En la mayoría de los casos, la textura de dicha secreción vaginal puede ser ligeramente viscosa o en forma de manchas. Normalmente es inodora y el color puede variar de blanco a amarillo claro en dependencia de las fases menstruales de cada mujer. La cantidad de moco vaginal secretado es generalmente baja, excepto cuando una mujer está embarazada o está en la fase secretora del ciclo menstrual, es decir, después de la ovulación y antes de la menstruación.

Esto también se aplica a los casos en que una mujer se excita sexualmente o recientemente ha dado a luz y está amamantando. Aquí, el flujo vaginal se hace más abundante de lo normal y en ocasiones tiene un ligero cambio en el color. Este es un flujo vaginal que no causa gran incomodidad y cuando se pone en contacto con la ropa interior, puede dejar pequeñas manchas débiles, que se pueden lavar fácilmente.

¿Cuándo es necesario consultar a un médico y cómo nos puede ayudar?

Si el flujo vaginal adquiere un olor fuerte inusual, de repente cambia de color o consistencia, o se acompaña de síntomas como picazón, ardor o dolor, entonces no debes dejar de ver a un ginecólogo. Tales cambios pueden indicar infección vaginal, inflamación o el comienzo de una enfermedad infecciosa. Una atención cuidadosa y la visita oportuna a la consulta de un médico ayudarían a evitar posibles enfermedades o detenerlas en una etapa temprana.

Un ginecólogo puede realizar los análisis adecuados para determinar la verdadera causa de los síntomas. Recurrir a los antibióticos, remedios tradicionales u otras medidas de auto-tratamiento en esta etapa queda estrictamente prohibido. El problema de las enfermedades infecciosas es que, a pesar de sus síntomas específicos, pueden enmascararse con bastante éxito y confundirse con otras. Si se adopta el tratamiento equivocado la enfermedad puede agravarse seriamente.

Si de pronto se le presenta un flujo vaginal blanco y extraño en sus zonas íntimas, no se asuste, consulte a un médico para asegurarse de las causas y así acelerar su recuperación. Generalmente este tipo de secreción vaginal tiene un pronóstico intrascendente.