Anatomía vaginal interna

A continuación daremos una breve descripción de las partes que componen la anatomía vaginal interna.

Vagina

La vagina mide solo alrededor de ¾ de pulgada de ancho y se extiende desde la abertura vaginal hasta el cuello uterino, hacia adentro. Es una estructura en forma de tubo muscular hueco, que sirve como receptáculo para el pene, como canal de salida para la sangre menstrual y para el bebé durante el parto vaginal.

La primera pulgada de la vagina es la más erógena y receptiva al placer, ya que aquí se encuentran la mayoría de las terminaciones nerviosas.

Dado que se compone de tejidos altamente elásticos puede estirarse y expandirse hasta alcanzar varias veces su tamaño original. Un buen ejemplo de esto es la salida del bebé durante el trabajo de parto.

La vagina tiene la capacidad de contraerse a su estado original, en el caso de las relaciones sexuales adquiere su tamaño normal en poco tiempo y en el caso del parto vaginal puede demorar aproximadamente 2 meses.

Glándulas de Bartholin

Son glándulas que recubren ambos lados de la abertura vaginal. Secretan pequeñas cantidades de fluido lubricante para mantener los labios interiores húmedos durante la excitación sexual.

Punto G

Todavía existe debate científico sobre la existencia de este componente en la anatomía vaginal interna. Se plantea que el punto G está relacionado con el fenómeno de la eyaculación femenina y se encuentra ubicado en la parte anterior y superior de la vagina.

Cérvix

Situado en la parte superior de la vagina y actuando como una puerta de entrada al útero, el cuello uterino se compone de músculos lisos y fibras de colágeno. Su diámetro varía de 1 a 3 cm, dependiendo de la fase en el ciclo menstrual. Normalmente está taponado con moco cervical para proteger al útero  de posibles infecciones. Durante la ovulación, este moco se transforma en un flujo delgado y viscoso para facilitar el paso de los espermatozoides.

Útero

El útero o matriz es el órgano principal en la anatomía vaginal interna. La pared interna del útero (endometrio) está revestida con una capa de células, que responden a la estimulación hormonal. Durante la ovulación, esta estimulación hace que el endometrio crezca y se espese en espera de un óvulo fecundado. Si la fecundación no tiene lugar, esta capa se desecha y es derramada como sangre menstrual. En caso de embarazo, el revestimiento se convierte en una especie de nido esponjoso para la implantación del óvulo fecundado, de forma que el bebé puede crecer y desarrollarse.

Ovarios

Los ovarios son los principales productores de estrógeno, la hormona sexual femenina. Al nacer, la mujer ya posee más de 400.000 folículos en sus ovarios. Cada mes se produce la ovulación como resultado de la maduración de un óvulo dentro de un folículo. A continuación viaja por la trompa de Falopio durante unos 3 o 4 días. Este es el momento en que la mujer es más fértil y por tanto es más probable la concepción de un embarazo.