Si estás embarazada este artículo te puede interesar. La presencia de uno o más de los siguientes síntomas merece la evaluación médica inmediata.
En primer lugar hablemos de la infección más común que afecta a las mujeres en general, no solo durante el embarazo. Se trata de la infección por levaduras, que podemos reconocer por síntomas como flujo vaginal blanco y grumoso, picor y sensación de ardor en la vulva. Aunque no es una condición grave, la infección por levaduras puede ser un síntoma de otro padecimiento, por ejemplo de diabetes gestacional, algo a lo que las mujeres embarazadas son más susceptibles.
Si se observa un manchado de color rosa o rojo es importante ver a un médico inmediatamente, sobre todo si la mujer se encuentra en el primer trimestre o en su primer mes de embarazo. En algunos casos el sangrado vaginal puede indicar amenaza de aborto o aborto involuntario.
Por otro lado si surge una secreción de color grisáceo con mal olor como a pescado, entonces es posible que tenga la vaginosis bacteriana. Esta es otra infección común causada por el desequilibrio de bacterias en la vagina. Es importante recibir atención médica porque hay estudios que demuestran un mayor riesgo de parto prematuro en mujeres que contraen la vaginosis bacteriana durante el embarazo.
La presencia de una secreción vaginal amarilla o verdosa podría indicar una enfermedad de transmisión sexual, como la tricomoniasis, la gonorrea o la clamidia. Para descartar esta posibilidad es necesario recibir exámenes de laboratorio lo antes posible. Enfermedades como esta pueden causar complicaciones en el embarazo o ser transmitidas al bebé durante el parto.
Recordemos que el aumento de flujo vaginal es normal en el embarazo, no significa que haya infección. El flujo normal puede ser muy abundante, pero no debe tener mal olor significativo, coloración extraña o causar irritación, picor, ardor, etc.